Son las 00:27. Para aquel momento, la potencia ya se habrá reducido al nivel 700 MW, estipulado por el programa de prueba, pero luego, por alguna razón, comenzaría a bajar bruscamente.
Las 00:29. Estalla el conflicto en el panel de control. “La energía cae muy rápido, bajamos mucho más del nivel de seguridad requerido”, le dicen a Dyatlov el operador jefe y supervisor de turno. Pero él sigue insistiendo en realizar la prueba y exige aumentar la potencia por cualquier medio.
El experimento llega al pleno apogeo. A pedido del Ministerio de Energía Atómica se realizaba en secreto absoluto. Durante la Guerra Fría, existía el riesgo de un ataque contra la Unión Soviética.
En un pasado reciente, los aviones israelíes derrotaron una instalación nuclear en Iraq construida por especialistas de la URSS. El gobierno del país comenzó a exigir que los científicos soviéticos prueben el reactor para evaluar las posibles consecuencias de un ataque repentino, incluso para averiguar las capacidades de reserva de los equipos nucleares en condiciones de ausencia de energía.
¿Es el personal responsable de todo?
Hoy en día se considera que la causa del accidente de Chernobyl radica en el programa de prueba. Con los años, muchos expertos llegarán a una conclusión unánime de que el accidente fue imposible de evitar. Si el programa de prueba se lleva a cabo con la mayor precisión posible, el reactor aún así hierve, la circulación del agua a través de los canales tecnológicos cesa, el reactor se derrite, el vapor llena el espacio entre reactores y, a causa de la presión de vapor, al igual que en una cafetera, el techo del reactor vuela por los aires, expulsando el combustible nuclear.
Los desarrolladores del reactor conocían sus deficiencias y podían prever con precisión de segundos las consecuencias catastróficas del experimento planificado. Pero no fue así. Además, apresuradamente del accidente fue acusado el personal técnico de la estación. La investigación de las causas reales de la explosión se suspendió por muchos años.
Incluso hoy, resulta difícil obtener documentos de archivo secretos, declaraciones de los testigos, lo que probablemente abriría al mundo la cadena de consecuencias lógicas que llevaron a la explosión de la cuarta unidad de energía nuclear de Chernobyl.
¿Por qué movilizaron en Chernobyl a casi 900 mil personas de toda la antigua Unión Soviética? ¿Acaso era imposible prever que no todos estarían involucrados en la liquidación? Muchos no tenían donde alojarse y, tras recibir una gran dosis de radiación, la gente simplemente regresaba a casa. También es decepcionante que aún no hayan sido objeto de un análisis total las medidas para eliminar las consecuencias del accidente.
De hecho, resultó que muchos de las medidas eran erróneas y condujeron a un aumento en la escala del desastre. Probablemente, habrán pasado años hasta que todas las circunstancias de la terrible catástrofe atómica del siglo XX salgan a la luz y, al final, entendamos la razón del error fatal que le costó a la humanidad sufrimientos tan terribles.
