HISTORIA DEL DESASTRE DE CHERNOBYL
HISTORIA DEL DESASTRE DE CHERNOBYL

Por la onda de choque como resultado de la primera explosión en el edificio de la estación, la luz se apaga y el equipo deja de funcionar automáticamente. Los empleados que estaban en la consola, sin tener tiempo para comprender las causas y el alcance de lo sucedido, tras unos segundos son testigos de la segunda explosión, que pone en marcha una cadena mortal de consecuencias tecnogénicas que destruyeron por completo el reactor nuclear.

Su techo de más de quinientas toneladas, se esfuma, y el reactor se convierte en un hongo gigante que arroja más de 5 toneladas de combustible nuclear a la atmósfera. 700 toneladas de grafito radiactivo se dispersan por cientos de kilómetros y en cuestión de minutos el aliento de la muerte se extiende por todas partes.

Todos los que estaban en la estación en el momento del accidente, así como docenas de liquidadores, bomberos, personal de mantenimiento, testigos involuntarios de las explosiones, se enfrentarán a consecuencias horrorosas. Algunos de ellos no vivirán más de un día, y los que sobrevivan a la explosión rogarán por la muerte en agonía. La muerte vendrá a por ellos, quemando sus cuerpos desde adentro.

La radiación se dispersó no solo por Ucrania, sino también por Bielorrusia, Europa y la península escandinava. Solo al cabo de todo un día, los líderes de la URSS publicaron la versión oficial del accidente.

La posterior evacuación de Pripyat duró una semana. El nivel de radiación estaba inaceptablemente alto. Para evitar el pánico entre la población civil, se decidió no anunciar sus indicadores reales. Solo después de un tiempo todos conocerán estas desastrosas cifras, cuando todo el mundo ya haya comenzado a hablar sobre la magnitud del desastre provocado por el hombre en la URSS.